Dar el "sí" en Italia es cada vez más popular. El turismo de bodas se está convirtiendo en un buque insignia del sector. Las bodas italianas son una experiencia atractiva para muchos extranjeros.
Solo en 2022, el turismo de bodas registró un volumen de negocio de 599 millones de euros en Italia, alrededor de un 11% más que los niveles estimados en 2019. Hay 11.000 parejas extranjeras que han elegido casarse en Italia, y el 54% se decide por el rito simbólico. En 2023, se estima otro aumento de alrededor del 10%.
A menudo se elige Italia como lugar para un día tan importante porque los futuros esposos quieren descubrir lugares auténticos, insólitos, con culturas y tradiciones nuevas, que no sean sólo esos "lugares imprescindibles" que todo el mundo conoce. La palabra clave es experiencia.
Una boda de destino se configura, por tanto, como una tendencia cada vez más creciente de elegir celebrar la propia boda en una residencia distinta a la propia e Italia está registrando un importante consenso, de tal manera que se considera una gran oportunidad para la economía nacional y local.
El tipo de pareja que elige la boda en destino es un target medio-alto, con un rango de edad de 25 a 35 años (70%). Un aspecto muy importante a tener en cuenta es que el presupuesto invertido es mucho mayor que en una boda tradicional, con el mismo número de invitados, que en el caso de una destination wedding oscila entre 40 y 70, sin contar los gastos colaterales, desde el wedding planner a los fotógrafos pasando por el catering. Según la duración de la estancia, los cónyuges y los invitados se quedan una media de 3 noches.
La Toscana es el principal destino de bodas en Italia, con un 21% de parejas extranjeras que eligen sus bellezas paisajísticas y artísticas, seguida de Lombardía y Campania. Apulia parece estar creciendo rápidamente y toda la cadena de suministro está trabajando en red para crear un producto de calidad que pueda atraer cada vez a más parejas.
El gran reto de Italia será potenciar todos los demás destinos que no sean sólo de lujo y dar a conocer también las zonas menos infladas por el turismo de masas. A la cabeza de las estadísticas, Estados Unidos es el mercado que ostenta el récord, con un 33,7%, seguido del Reino Unido, Suiza, el norte de Europa, Alemania, Francia, Holanda, Australia, Rusia, Bélgica y China.
